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PREMIO CERVANTES

Ana María Matute:

"Toda la vida es mágica"

 

La escritora barcelonesa, eufórica tras ganar el

 Cervantes, se convierte en la tercera ungida con el

 galardón más prestigioso de nuestras letras

 

 

ELCULTURAL.es | Publicado el 24/11/2010


Ya lo advirtió hace unos días Ana María Matute: “Si me dan el Cervantes, daré saltos de alegría”. Al final se lo han dado y si no ha dado los saltos prometidos es porque con 85 años los alardes físicos pueden ser muy arriesgados. Eso sí, la escritora barcelonesa ha llegado eufórica al Hotel Palace de Barcelona esta tarde para expresar a los cuatro vientos “el estallido de felicidad” que estaba viviendo.

Matute, que ocupa el sillón K en la Real Academia Española, ha confesado: "Uno no escribe para ganar premios, habrá quien lo haga, pero yo no entro en esos filos". Y ha añadido: "Uno podrá ser mejor o peor, pero siempre es él mismo. Desde el primer cuento que escribí hasta ahora siempre he querido transmitir la misma sensación de desánimo y pérdida".

De estos días plomizos rescata el impulso que le dio la editora y agente literaria Carmen Balcells: “Ella tuvo mucho que ver con mi recuperación” para la literatura.


La escritora, de 85 años y que ya había sonado en múltiples ocasiones para el reconocimiento más importante de las letras españolas, se convierte así en la tercera mujer distinguida con el galardón, en sus 35 ediciones. Las otras dos mujeres fueron la española María Zambrano en 1988, y la cubana Dulce María Loynaz en 1992.


Eterna candidata
El máximo galardón de la literatura en castellano está dotado con 125.000 euros y fue creado en 1975 por el Ministerio de Cultura para reconocer la figura de un escritor que, con el conjunto de su obra, haya contribuido a enriquecer el legado literario hispánico. En la edición de 2009 recayó en el poeta y narrador mexicano José Emilio Pacheco, por lo que este año, y siguiendo la tradición no escrita, el galardón debía reacaer en un autor español. La ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, ha hecho público el fallo tras la reunión que mantuvo el jurado, y ha explicado que se han producido seis votaciones y en la última se ha aprobado el nombre de Matute por mayoría.

"Es un premio que llega tarde", dice Martín Garzo
El escritor Gustavo Martín Garzo, que siempre ha ensalzado el “encanto” y la “profundidad” de la obra de Matute, se ha mostrado “muy contento” tras conocer la noticia, que, según él, “llega tarde”. 

 
El paraíso habitado por Matute

Nacida en Barcelona en 1925, en el seno de una familia de la burguesía catalana, se dio a conocer en la escena literaria española con Los Abel, novela en la que refleja la atmósfera española posterior a la Guerra Civil desde un punto de vista infantil, un enfoque que mantuvo constante a lo largo de su primera producción novelística y que fue común a otros representantes de su generación, conocida como la de los "niños asombrados". A los cinco años, enferma del riñón, escribió su primer relato y a los ocho, de nuevo convaleciente, se trasladó al pueblo riojano de Mansilla de la Sierra con sus abuelos. Tenía diez cuando comenzó la Guerra Civil que la marcaría hondamente. En 1943, con diecisiete años, escribió su primera novela, Pequeño teatro, que no se publicó hasta ocho años después. Primera memoria (1959), Los soldados lloran de noche (1963) y La trampa (1970) forman la trilogía Los mercaderes. Entre 1965 y 1966 fue lectora en la Universidad de Bloomington (Indiana, EE.UU.), en 1968 en la de Norman (Oklahoma, EE.UU.) y en 1977 viajó a Bulgaria con Escritores por la Paz.

Nominada al Premio Nobel de Literatura en 1976

Es también la autora de relatos cortos y cuentos para niños, como Vida nueva, Paulina, el mundo y las estrellas, Libro de juegos para los niños de los otros, Caballito loco, El saltamontes verde, El verdadero final de la Bella Durmiente o Casa de juegos prohibidos. Miembro honorario de la Hispanic Society of America y de la American Association of Teachers of Spanish and Portuguese, la Universidad de Boston tiene en su biblioteca de fondo a Ana María Matute Collection. Sus libros han sido traducidos a 23 idiomas. 

Eterna candidata
El máximo galardón de la literatura en castellano está dotado con 125.000 euros y fue creado en 1975 por el Ministerio de Cultura para reconocer la figura de un escritor que, con el conjunto de su obra, haya contribuido a enriquecer el legado literario hispánico. En la edición de 2009 recayó en el poeta y narrador mexicano José Emilio Pacheco, por lo que este año, y siguiendo la tradición no escrita, el galardón debía reacaer en un autor español. La ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, ha hecho público el fallo tras la reunión que mantuvo el jurado, y ha explicado que se han producido seis votaciones y en la última se ha aprobado el nombre de Matute por mayoría.

"Es un premio que llega tarde", dice Martín Garzo
El escritor Gustavo Martín Garzo, que siempre ha ensalzado el “encanto” y la “profundidad” de la obra de Matute, se ha mostrado “muy contento” tras conocer la noticia, que, según él, “llega tarde”. “Teniendo en cuenta su edad y su importancia, deberían habérselo dado hace ya varios años”. El autor vallisoletano dedicó su última novela, Tan cerca del aire, a ella: “A Ana María Matute, que tiene un ala de cisne”. En su opinión, “la capacidad fabuladora” de la novelista barcelonesa es “muy poco común en nuestras letras”. “Sólo Cunqueiro está a su altura”. También advierte que su literatura le recuerda mucho a la de Andersen: “Una mezcla magistral de perversidad candor”.

El paraíso habitado por Matute

Nacida en Barcelona en 1925, en el seno de una familia de la burguesía catalana, se dio a conocer en la escena literaria española con Los Abel, novela en la que refleja la atmósfera española posterior a la Guerra Civil desde un punto de vista infantil, un enfoque que mantuvo constante a lo largo de su primera producción novelística y que fue común a otros representantes de su generación, conocida como la de los "niños asombrados". A los cinco años, enferma del riñón, escribió su primer relato y a los ocho, de nuevo convaleciente, se trasladó al pueblo riojano de Mansilla de la Sierra con sus abuelos. Tenía diez cuando comenzó la Guerra Civil que la marcaría hondamente. En 1943, con diecisiete años, escribió su primera novela, Pequeño teatro, que no se publicó hasta ocho años después. Primera memoria (1959), Los soldados lloran de noche (1963) y La trampa (1970) forman la trilogía Los mercaderes. Entre 1965 y 1966 fue lectora en la Universidad de Bloomington (Indiana, EE.UU.), en 1968 en la de Norman (Oklahoma, EE.UU.) y en 1977 viajó a Bulgaria con Escritores por la Paz.

Nominada al Premio Nobel de Literatura en 1976, en 1984, tras varios años de silencio narrativo, obtuvo el Premio Nacional de Literatura Infantil con Sólo un pie descalzo. En 1996 publicó Olvidado Rey Gudú y fue elegida miembro de la Real Academia Española para ocupar el sillón K, vacante tras el fallecimiento de Carmen Conde. Sus últimas obras son Aranmanoth (2000) y Paraíso inhabitado (2008). De esta última escribió Santos Sanz Villanueva en El Cultural: "En buena medida, Matute ha escrito una autobiografía imaginaria, síntesis de sus ideas y de su obra, que vale como el testamento literario que lega alguien curtida en experiencias".
Es también la autora de relatos cortos y cuentos para niños.

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